POR: Francisco Arenas Murillo
PASADO EL MOMENTO DE LA INCERTIDUMBRE Y LA FALTA DE INFORMACIOÓN PRECISA, LA GOBERNADORA DE SONORA ASUMIÓ UNA DE LAS DECISIONES MÁS IMPORTANTES durante su mandato como ejecutiva estatal y determinó decretar una declaratoria de Emergencia y Contingencia Sanitaria Epidemiológica para el Estado y con lo cual convierte a esta región en la primera zona en donde se toma una acción de esta naturaleza.
La premisa de la mandataria sonorense para decretar esa medidas es que “si perdemos la salud lo perdemos todo” y desde esa perspectiva se asumirán medidas que buscan impedir un contagio masivo a través de virus del COVID-19 que en el mundo ha provocado ya miles de muertes.
La ruta planteada será temporal, pero necesaria dijo Claudia Pavlovich en donde incluye cinco puntos fundamentales con el centro de atención en a necesidad de preservar la vida y la salud en donde se fortalecerá la estrategia “Quédate en Casa” y que se fortalecerá a inicios del fin de semana.
En esta emergencia sanitaria, la gobernadora contó con el respaldo de los principales sectores productivos del Estado con quienes creó la alianza #JuntosJalamos.
En eso mismo, las empresas deberán acatar la declaratoria de emergencia y deberán permitirles a sus trabajadores acogerse a lo que marca la ley para garantizar la cadena de abasto.
A este esfuerzo deberán sumarse los 72 alcaldes de Sonora pues la gobernadora les resaltó que son tiempos difíciles para toda la sociedad y aquí deberán entender dejar de lado sus intenciones partidistas, sus filias y sus fobias e incluso sus proyecciones personales para un futuro aún incierto.
Con el ordenamiento estatal, será obligatoria la suspensión de labores en todos los municipios del Estado, reducir las jornadas de trabajo presencial (salvo labores escenciales), y la instrucción debe acatarse.
La gobernadora subrayó tajantemente que el esfuerzo es de todos, pues los empresarios hacen un sacrificio paralizando sus empresas y el gobierno algunas de las áreas de trabajo no escenciales.
Quédate en casa será en los próximos días no una opción para los sonorenses, sino una instrucción gubernamental y quedarán prohibidos eventos sociales o publicos como reuniones de culto religioso, ferias, festivales, foros, inauguraciones, presentaciones, seminarios, talleres, bautizos, quinceañeras, guarderías,museos, reuniones o festejos familiares que impliquen aglomeración de personas en espacios cerrados, entre otros.
Se ordena el cierre de cantinas, bares, casinos, centros de espectáculos, centros nocturnos, cines, circos.
Las personas deberán permanecer en sus hogares si no tienen una causa urgente o imprescindible que lo obligue a salir de ella, no permanecer fijo en parques o lugares públicos, entre otras.
De acuerdo al mismo decreto de emergencia, se establecen sanciones administrativas a cualquier persona física o moral que se oponga, resista o dificulte la implementación de las medidas descritas en la declaratoria.
Y aquí algo interesante: las autoridades podrán recurrir al uso de la fuerza pública a efecto de hacer cumplir las determinaciones emanadas de ese decreto.
No se trata de sumprimir las garantías individuales, sino de garantizar como lo dijo la gobernadora, la estabilidad de las familias y la salud de sus integrantes.
El decreto es muy amplio y contempla apoyos importantes para los sectores involucrados, desde la adqusición de beneficios fiscales y financieros y, en sun caso, gestiones ante instancias federales para respaldos económicos.
Es una determinación decidida, fuerte, por parte de la gobernadora de Sonora Claudia Pavlovich, pero necesaria y seguramente serpa replicada en otras regiones del País.
Es por el bien de todos.
Y DENTRO DE TODA ESTA VORÁGINE DE NOTICIAS Y ESCENARIOS, PARA CAJEME SE AVECINAN MUY BUENOS TIEMPOS PUES quizá pasada la contingencia y emergencia sanitaria por el COVID-19, se anunciarán desarrollos e inversiones de gran importancia para esa comunidad sonorense.
Ya les contaremos.